La reciente publicación del informe de intervención sobre la gestión económica y financiera del ayuntamiento de Colmenar Viejo, gobernado por el Partido Popular y VOX, ha revelado una serie de irregularidades y malas prácticas que exponen una preocupante falta de control y transparencia en la administración local.
23 de septiembre de 2024. Para los socialistas, este informe de la Intervención debería servir como una herramienta para mejorar la eficiencia en el uso de los recursos públicos, en cambio, evidencia una gestión desordenada y, en algunos casos, potencialmente contraria a la normativa vigente.
Desorganización crónica y falta de transparencia
Una de las principales conclusiones del informe es la desorganización generalizada en la documentación de varios expedientes. En áreas tan importantes como las subvenciones a entidades deportivas y ayudas sociales, la falta de coherencia en los documentos es alarmante. A esta desorganización se suma la ausencia de rúbrica de los funcionarios, lo que impide identificar a los responsables de la tramitación de los expedientes. Este caos administrativo no solo compromete la transparencia de la gestión, sino que también pone en peligro la legalidad de muchas decisiones tomadas por el equipo de gobierno del Partido Popular.
En un municipio que presume de eficiencia y transparencia, estas deficiencias no pueden ser ignoradas. Sin una correcta organización y la correspondiente validación de los funcionarios, la auditoría y supervisión de los procesos se convierte en un laberinto de ineficiencia, afectando la calidad de los servicios públicos y el uso adecuado de los fondos.
Fraccionamiento de contratos: una táctica recurrente
También se aprecia una práctica continuada de fraccionamiento de contratos, especialmente en lo que respecta a la organización de eventos. ¿Puede interpretarse que una empresa ha sido favorecida de forma reiterada en el tiempo, si ha sido adjudicataria de múltiples contratos menores fraccionados, precisamente para evitar los controles más estrictos que la norma exige a los contratos de mayor cuantía?
En 2022, el fraccionamiento de contratos alcanzó niveles alarmantes. El fraccionamiento de contratos no solo vulnera la normativa de contratación pública, sino que impide la competencia y transparencia en la adjudicación de estos servicios, favoreciendo a un solo proveedor de manera sistemática. Esta táctica, amparada bajo el manto del Partido Popular, refleja un preocupante patrón de falta de competencia y posible favoritismo.
Justificación inadecuada de ayudas y subvenciones
Otro punto crítico del informe es la inadecuada justificación de subvenciones y ayudas. En muchos casos, la documentación presentada por los beneficiarios es incompleta o incorrecta, lo que podría levantar sospechas sobre si el uso de los fondos públicos es el más adecuado. Este descontrol afecta tanto a las entidades deportivas como a las ayudas sociales, áreas vitales para el bienestar de la comunidad. En un momento en que la transparencia y la rendición de cuentas son esenciales para recuperar la confianza ciudadana, el Ayuntamiento de Colmenar Viejo parece estar más interesado en mantener las apariencias que en garantizar un uso correcto de los recursos públicos.
Conclusión
Los socialistas lo tenemos claro, el Ayuntamiento de Colmenar Viejo, bajo la gestión del Partido Popular y ahora en coalición con Vox, ha demostrado una incompetencia preocupante en la administración de los recursos municipales. La falta de control, la opacidad y las presuntas prácticas irregulares, como el fraccionamiento de contratos, ponen en entredicho su capacidad para gobernar de manera eficiente y justa.
Para terminar, las medidas correctivas propuestas en el informe de intervención son necesarias, pero insuficientes si no van acompañadas de un verdadero compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas. Los vecinos y vecinas de Colmenar Viejo no merecen menos.